Para el desarrollo de este proyecto se realizó una investigación a detalle de los efectos secundarios de dos alucinógenos en específico, las sales de baño y el Krokodil, los cuales fueron considerados como los opiáceos más apropiados para la creación de dos personajes en el ámbito del maquillaje de efectos especiales. Estos personajes buscan reflejar la realidad de muchas personas inmersas en el mundo de la drogadicción de forma cruda y, asimismo, mostrar algunas de las alteraciones físicas y mentales que estas pueden llegar a causar tanto en el cuerpo humano como al sistema inmune.